En el post anterior hemos visto los principales tipos de pintura para superficies de piscina y algunos consejos para aplicarlos de forma correcta. Sin embargo, cada vez es más frecuente encontrar piscinas de fibra, también conocidas como piscinas de resina o poliéster.
En nuestra tienda de pinturas online encontrarás esmaltes de poliuretano para hacer los mantenimientos de los vasos de fibra.
Se trata de una solución de alta adherencia para repintar las piscinas cuando han perdido el color por la incidencia de los rayos del sol o los agentes químicos para tratar el agua.
Antes de pintar
Antes de pintar este tipo de superficies deberás lijarlas suavemente, tratando de dejar un ligero rayado que favorezca el anclado de la pintura. Este tipo de trabajo suele generar polvo y suciedad que es necesario eliminar mediante el lavado a presión.
Cuando la piscina se encuentre en mal estado o tenga mucha cal incrustada en las paredes del vaso será necesario limpiarla con agua fuerte o con ácido clorhídrico rebajado con agua. Una vez seca, tras la limpieza, ya puedes aplicar dos o tres manos de la pintura especial para piscinas de fibra.
Es importante cruzar la dirección de las diferentes capas de pintura para conseguir una barrera de sellado, que evite la aparición de ampollas que suelen surgir por la humedad.
Además, no deberás dejar transcurrir más de 72 horas entre mano y mano para que no se produzca el proceso de curado y se cierren los poros y no se consiga un anclaje adecuado entre capas.
Otra cuestión a tener en cuenta, es que las pinturas de poliuretano pueden generar espuma cuando se aplican con rodillo, por lo que es recomendable añadir pintura con aditivo desairante que impide que el aire quede atrapado dentro de la película.
Espera 7 días para llenar la piscina
Desde UNI-HER te recomendamos esperar 7 días para llenar la piscina tras la aplicación de la pintura para que el proceso de secado sea completo. En caso contrario, la presión del agua del vaso podría arrancar o dañar la película de la pintura. Los errores más comunes durante el proceso, que conviene evitar son:
- Uso de un disolvente inadecuado: Cuando se utilizan disolventes de mala calidad puede darse el caso de que el proceso de secado no se realice correctamente.
- Pérdida de adherencia: Las capas de pintura no deben ser demasiado gruesas, ya que no serían capaces de expulsar el exceso de disolvente, creando problemas de adherencia.
- Deterioro por elementos químicos: Estos productos que se aplican para el mantenimiento de piscinas son agresivos y pueden alterar las propiedades químicas de la pintura.
